La semana pasada decíamos que acudir a la psicología “no es cosa de locos”, pero además muchas veces asociamos el asistir a una consulta de psicología con intentar evitar o disminuir el sufrimiento.
Con este pensamiento ya estamos dando por supuesto que vamos cuando estamos mal, cuando estamos sufriendo.
Hoy me gustaría dar la vuelta a este pensamiento, y mientras estoy haciendo un poco de deporte pienso en lo bien que me encuentro, y que gracias a este ejercicio físico cada vez me encuentro un poco mejor, y quiero seguir sintiéndome así, por lo que no voy a dejar el deporte para así sentirme cada vez más a gusto conmigo.
Por un simple proceso de asociación de ideas me viene a la cabeza que la mente es igual que el cuerpo, que si sigo trabajando y si sigo obteniendo orientación profesional, cada día voy a estar mejor, cada dia VOY A SER MÁS FELIZ.
Quizá suene a utopía, quizá alguien piense en el debate de si existe o no la felicidad, si son momentos, estados o yo que sé, eso lo guardo para otro día, pero ahora, no sólo lo pienso, sino que estoy totalmente seguro de que al igual que el deporte, el trabajo mental adecuado y orientado, hará que cada día sea más feliz.
Así que ya no voy a considerar la asistencia psicológica como una forma de sufrir menos, puesto que estaría poniendo límites y diciendo a la persona que se siente bien: “tu no vengas”, no, lo que voy a hacer es decir: “si quieres ser más feliz, ven”
José Luis Ahedo
Psicólogo / Orientación
