Usa el deporte como forma de evasión; como válvula de escape y sobre todo para mantener tu salud en un estado óptimo.
Si habitualmente realizas actividad física, quizá pienses que este artículo no es para ti, pero aún así merece la pena dedicarle unos minutos porque puede ser que te resulte útil.
Si nunca has practicado ningún deporte, podrías empezar por lo más sencillo, andar. Caminar durante una hora tres veces a la semana es suficiente, en una cinta o al aire libre, si bien esta última opción nos parece mejor siempre y cuando el tiempo lo permita. Disfruta de tu actividad en días alternos, es decir intercalando días de descanso entre los días de caminata. A partir de ahí puedes seguir con esta actividad o cambiar.
Si ya estás realizando algún tipo de ejercicio físico, continúa con él a no ser que notes que el tipo de ejercicio que realizas no te sirve como forma de evasión porque no se te quitan de la cabeza los problemas y las preocupaciones.
Hay actividades que requieren poca concentración en su práctica, como correr, andar, etc., y esa característica puede provocar que no consigas la evasión que precisas, en estos casos, puedes hacer varias cosas, como por ejemplo, ir acompañada; llevar música o cualquier tipo de audio que te guste; o cambiar a un tipo de ejercicio en el que necesites estar concentrado en lo que haces, es decir que sea más técnico, para que así tu mente esté ocupada en la ejecución y se olvide de otras cosas.
Déjate guiar por los profesionales en este sector como por ejemplo Body Teach de Santutxu, debemos tener en cuenta que la mayoría de los monitores reciben formación u orientación como la que, por ejemplo, imparte Ortus Fittnes; o EMTESPORT, y así te podrán aconsejar adecuadamente en la consecución de tus objetivos.
No obstante, sea cual sea el deporte que elijas, siempre te servirá para liberar tensiones, puesto que cuando pasamos por una situación estresante, nuestro cuerpo se prepara, normalmente, para la acción y si no se la damos, podemos llegar a enfermar; sin embargo, al darle a nuestro cuerpo la acción que precisa, nuestros niveles de estrés se normalizarán y nos encontraremos mucho mejor.
Es decir, conseguiremos, además tener un estado de salud óptimo, no llegar a parecernos a una “olla express” que salta en el momento más inoportuno.
Sin embargo, conviene recordar que el deporte puede ser adictivo, así que no olvides que nuestro consejo es usar el deporte como una forma más de mantenerte bien con el fin último de no desfallecer, ni física, ni mentalmente, en el arduo camino que es la búsqueda de empleo.
En la planificación que hagas de tu tiempo, reserva un espacio para el deporte, pero no dejes que ocupe más de lo necesario.